jueves, 10 de mayo de 2012

los genes y la memoria

La Inteligencia y la Memoria No se heredan 

La herencia genética no transmite sino entre otras la herencia cerebral, pero no la mente y sus facultades; es por ello que la inteligencia ni la memoria ni sus recuerdos no se heredan: 

Por eso la educación no es capaz de aumentar la inteligencia ni las facultades mentales como la ética o transmitir el sentido de la vida; Porque eso es algo que no se puede transferir sino presentar a la mente por medio del cerebro. POr el contrario todo lo que haya en una máquina puede ser heredado por otra. Se hereda la información y su soporte genético pero no la facultad; porque la facultad no está en la estructura cerebral ni genética; ya que la estructura no es sino un efecto espejismo de la mente y sus facultades...El software no está en la estructura, sino que crea y maneja la estructura para poder expresarse convenientemente a través de ella. Si tu heredas un aparato de televisión no heredas los programas que retransmitieron en su día. POR ESO NO SE HEREDA NI LA INTELIGENCIA NI LA MEMORIA. 
La inteligencia y la memoria no están en el cerebro, en sus neuronas; pero si no tienes los circuitos neuronales adecuados cual televisor con los canales suficientes y adecuados no podrás recepcionar grandes facultades y memorias…Debido a ello, muchos confunden la mente con el cerebro: la causa con su efecto. Y lo peor es que aun así se precian de ser grandísimos psicólogos, psiquiatras, etc, llegando en los casos más agudos e incluso crónicos a creerse superdotados o genios en la materia. Cuando son presas de tales creencias y presuntuosidad sin límites; y tampoco se molestan en experimentar y comprobar la realidad descrita aun cuando en sus universidades tienen los medios para hacerlo.



Neurología: Identifican genes que deterioran la memoria



Dos equipos de científicos internacionales que estudian el Alzheimer, uno en Estados Unidos y otro en Francia, han logrado identificar algunas modificaciones genéticashereditarias que tienen que ver con la aceleración del deterioro cerebral, en especial de la región conocida como “hipocampo“, muy relacionada con los procesos dememoria.
Los estudios han sido publicados en la revista “Natural Genetics“. A la aceleración deldeterioro cerebral se le conoce también como “envejecimiento prematuro“, algo que se halla en los cuadros de Alzheimer.
Se trata principalmente de una reducción de esa zona, algo que se conoce como “atrofia del hipocampo“, que es una de las características conocidas del Alzheimer, y que lo diferencia de otros tipos de demencia senil.
Según reportan estos estudios, en los que participaron los neurólogos Charles DeCarli(Universidad de California) y Christophe Tzourio (Univesidad de Bordeaux) serían cuatro genes los responsables de acelerar el estrechamiento del hipocampo: el gen HKR, el gen WIF1, el DPP y el ASTN2. Pero todavía no se conoce el mecanismo exacto de este proceso.
Los investigadores confían en que más estudios de estos genes podrán convertirse en herramientas terapéuticas que hagan posible proteger la memoria o al menos hacer mucho más lento el deterioro, sobre todo en casos de Alzheimer.

FUNCIONES HEMISFERIO DERECHO E IZQUIERDO



 FUNCIONES HEMISFERIO DERECHO E IZQUIERDO



Los hemisferios cerebrales, se decía inicialmente, eran similares, no sólo en cuanto a su estructura, sino también en los aspectos funcionales. Las primeras explicaciones con respecto a las diferencias entre los dos hemisferios cerebrales se deben a la observación de Max, en el siglo XIX, al describir el compromiso del lenguaje oral a partir de lesiones en el hemisferio izquierdo.



Fue Broca, no obstante, quien evaluó una serie de pacientes con lesión en el hemisferio cerebral izquierdo, más precisamente en el lóbulo frontal, en el área 44 y parte del área 45 de Brodmann, llamada también área de Broca, o área anterior del lenguaje. Comprobó la relación de esta lesión con las dificultades encontradas en la programación motora del habla. Wernicke, estudiando las percepciones auditivas implicadas en el entendimiento del lenguaje oral, sitúa esta función en el hemisferio cerebral izquierdo, en el lóbulo temporal, en el área posterior del lenguaje o área de Wernicke. Estas observaciones iniciales que señalaban las diferencias entre los dos hemisferios cerebrales tuvieron continuidad en otros estudios posteriores que demostraban tales diferencias, siempre con un mayor enfoque en el hemisferio izquierdo, llamado, por este motivo, hemisferio dominante

Actualmente, está clara la lateralización de funciones más simples como la motricidad, en relación con funciones más complejas y con lateralización menos conocidas. Se sabe que los dos hemisferios cerebrales actúan juntos pero ya no hay dudas de que hay un claro dominio para funciones diversas, o para diferentes aspectos de una misma función.










Hemisferio Izquierdo
Hemisferio Derecho
Verbal: Usa palabras para nombrar, describir, definir.
No verbal: Es consciente de las cosas, pero le cuesta relacionarlas con palabras.
Analítico: Estudia las cosas paso a paso y parte a parte.
Sintético: Agrupa las cosas para formar conjuntos.
Simbólico: Emplea un símbolo en representación de algo. Por ejemplo, el dibujo Descripción: ojo significa "ojo"; el signo +representa el proceso de adición.
Concreto: Capta las cosas tal como son, en el momento presente.
Abstracto: Toma un pequeño fragmento de información y lo emplea para representar el todo.
Analógico: Ve las semejanzas entre las cosas; comprende las relaciones metafóricas.
Temporal: Sigue el paso del tiempo, ordena las cosas en secuencias: empieza por el principio, relaciona el pasado con el futuro, etc.
Atemporal: Sin sentido del tiempo, centrado en el momento presente.
Racional: Saca conclusiones basadas en la razón y los datos.
No racional: No necesita una base de razón, ni se basa en los hechos, tiende a posponer los juicios.
Digital: Usa números, como al contar.
Espacial: Ve donde están las cosas en relación con otras cosas, y como se combinan las partes para formar un todo.
Lógico: Sus conclusiones se basan en la lógica: una cosa sigue a otra en un orden lógico. Por ejemplo, un teorema matemático o un argumento razonado.
Intuitivo: Tiene inspiraciones repentinas, a veces basadas en patrones incompletos, pistas, corazonadas o imágenes visuales.
Lineal: Piensa en términos de ideas encadenadas, un pensamiento sigue a otro, llegando a menudo a una conclusión convergente.
Holístico: Ve las cosas completas, de una vez; percibe los patrones y estructuras generales, llegando a menudo a conclusiones divergentes.

EL SUEÑO


EL SUEÑO

Vigilia: que es la etapa en la cual estamos despiertos y activos. Durante esta fase predominan  las frecuencias rápidas y de bajo voltaje en el registro de EEG (electroencefalograma).

Sueño de Ondas Lentas: se caracteriza por un registro de actividad del EEG dominado por ondas de baja frecuencia y alto voltaje, las llamadas ondas lentas o delta del electroencefalograma. El sujeto permanece recostado e inactivo. En el humano se divide en 4 fases, lo cual depende de la cantidad de ondas lentas presentes en el registro de EEG.

Sueño de movimientos oculares rápidos (MOR): durante esta etapa de sueño la actividad del cerebro es muy similar a la registrada en un estado de vigilia. Sin embargo, el sujeto esta dormido y presenta movimientos oculares rápidos, de ahí el nombre de la fase. A esta etapa corresponde el periodo en el cual soñamos. Conductualmente permanecemos inactivos

La función del sueño

  
 Durante  la vigilia tenemos un alto grado de actividad, desgaste físico y mental, durante el sueño recuperaríamos energía y restableceríamos al sistema para iniciar otro ciclo de actividad.
Cumple la función de restaurar más al cerebro que al cuerpo. Esto es debido a que lo único que se manifiesta diferente durante el sueño es la actividad eléctrica del cerebro. Por ejemplo, el sueño se distingue de la vigilia quieta por los cambios en la actividad neuronal (registro de electroencefalograma EEG) y la perdida de sensibilidad conductual.



La privación de sueño afecta más a los procesos cognoscitivos como: memoria, aprendizaje, atención, etc., que al funcionamiento del cuerpo. Por ejemplo periodos cortos (3 a 6 horas) o periodos largos (más de 24 horas) de privación de sueño, tiene como consecuencia un aumento en la potencia (amplitud) de las ondas de baja frecuencia (0.25-4.0 Hz), también llamadas ondas lentas del EEG. Adicionalmente, la potencia de las ondas lentas va decayendo conforme se recupera el tiempo de sueño perdido, por lo tanto hay una  relación directamente proporcional con el tiempo de vigilia. Es decir, el tiempo de privación de sueño induce una mayor intensidad en la potencia de las ondas lentas y esta intensidad va decayendo conforme se prolonga y recupera el sueño. Esto ha sugerido que la falta de sueño induce cambios sobre las propiedades eléctricas de las neuronas.

          Hace algunas décadas se propuso  que el sueño MOR tenía una función de reprogramación. Se ha sugerido que esta fase es necesaria para el establecimiento de nuevas vías funcionales en organismos lesionados (Jouvet, 1998). En otras palabras sin sueño MOR no hay reprogramación que permita la recuperación funcional después de lesiones del sistema nervioso central, desde el punto de vista clínico se ha observado que los pacientes que exhiben signos de recuperación presentan una mayor cantidad de sueño MOR que aquellos con daño cerebral similar que muestran poca mejoría. De acuerdo con Jouvet (1998) durante el sueño MOR se lleva acabo una programación periódica del sistema nervioso que mantendría o facilitaría los sistemas neuronales responsables o implicados en la ocurrencia de estímulos internos innatos y de patrones motores fijos.
Esta hipótesis explicaría el por qué durante una situación de estrés por ejemplo, la consecuencia inmediata durante el sueño subsecuente es aumentar el sueño MOR. Este aumento de sueño MOR tendría como función la de mantener la reprogramación, tal vez a partir de regenerar circuitos dañados por el estrés, así como el establecimiento de nuevas conexiones sinápticas. Evidencias recientes han mostrado que el estrés tiene un efecto dañino sobre la parte del cerebro directamente relacionada con los procesos de aprendizaje y memoria, el hipocampo. Por otra parte, también se cree que el sueño MOR sirva como “ventana” de aprendizaje y el aumento ocasionado por el estrés sea consecuencia de que el animal tiene que consolidar lo aprendido durante la situación de estrés, que le permita en la siguiente ocasión poder enfrentarlo y sobrevivir.

           En estudios hechos en animales que han sido privados de sueño MOR se ha observado que consolidan menos la tarea aprendida que los que si tuvieron sueño MOR. Lo cual sugiere el papel que el sueño MOR tiene sobre los procesos de aprendizaje y memoria. Evidencias recientes han mostrado que ciertas poblaciones de neuronas localizadas en puntos específicos del hipocampo incrementan su frecuencia de disparo en los periodos subsecuentes al sueño, después de que los animales han sido expuestos a diferentes situaciones, esto indica que durante el sueño se lleva acabo el procesamiento de información de lo aprendido en la fase de vigilia. Por lo tanto, en una situación de estrés o de ingesta de comida la función principal del sueño MOR es la consolidación de la información y el restablecimiento de nuevas conexiones, que nos llevan a la reprogramación sugerida por Jouvet (1998). Tal vez un papel protector del sueño que permite consolidar conductas como un mecanismo adaptativo en busca de la permanencia de la especie.



         De igual manera se ha propuesto que la información adquirida por el cerebro durante la vigilia es secuencialmente procesada durante el sueño de ondas lentas y el sueño MOR. El procesamiento de la información durante el sueño es resultado de la eliminación de información irrelevante y la integración de la información necesaria (patrón de respuesta adaptativa). Esto implica que existe una recolocación de las trazas de memoria en diferentes sitios del cerebro. Si bien es cierto esto, en cada ciclo de sueño los procesos de memoria y consolidación de esta, estarían implícitos y su relevancia dependería de la naturaleza de la experiencia previa. Recientemente se ha demostrado que la expresión de ciertos genes cambia durante el sueño y en algunos casos es dependiente de la experiencia previa. Estos resultados se han relacionado con procesos plásticos del cerebro y con los mecanismos relacionados con la consolidación de la memoria. Se ha observado que en animales que son expuestos a un ambiente enriquecido de estímulos somatosensoriales, el numero de genes que se expresan en su cerebro es mayor que los que no fueron expuestos. De igual manera se ha observado que la actividad del cerebro humano cuantificada a partir de tomografía por emisión de positrones (PET) es mucho mayor durante el sueño MOR, en personas que han sido entrenadas en pruebas de aprendizaje. Estos resultados en conjunto muestran que la actividad del cerebro cambia durante el sueño y es dependiente del estimulo previo antes de ir a dormir.



         En conclusión, la función del sueño sigue siendo una gran incógnita, sin embargo lo que sí es cierto es que 1/3 parte de nuestra vida dormimos y sino lo hacemos tenemos como resultado la muerte. Tan importante es que es lógico pensar "que la forma en que lo hacemos día con día" no tiene por qué ser necesariamente la misma. Cada día nos exponemos a situaciones diversas que de alguna u otra manera tienen un impacto sobre la forma en que dormimos. La estructura del sueño depende en gran medida del evento previo y de que tan predominante sea este, sobre el resto de las experiencias a las cuales estamos 
  

FASES DEL SUEÑO


Durante muchos años los científicos y psicólogos indagaron sobre el sueño y sus etapas tratando de develar sus secretos. En Ojocientífico te explicamos de manera sencilla las etapas del sueño.

El psicólogo estadounidense William C. Dement, nacido en 1928, mientras realizaba sus habituales observaciones de campo con pacientes dormidos notó que durante una etapa del sueño tenían lugar Movimientos Oculares Rápidos MOR (REM en inglés, Rapid Eye Movement), en los que la respiración aumentaba junto con la pulsación y la presión sanguínea, alcanzando los niveles de la vigilia. Este descubrimiento fue fundamental para definir las etapas del sueño. Y más adelante se conocería que esta fase ocupa casi una cuarta parte del período de sueño.

Tras varios años de estudios se lograron definir dos estados de sueño con sus correspondientes etapas:
 


1.- Fase del Sueño Ligero que es la transición desde la vigilia al sueño y aparece en ella un patrón regular α (alfa de amplitud de onda alta y regular) con movimientos oculares lentos.

2.- Complejos K: aparecen en esta etapa los husos de sueño (descargas de alta frecuencia positivas y negativas de corta duración).En esta etapa no existe la actividad ocular.

3.- Se caracteriza por ser un sueño de actividad delta de amplitud elevada (con más del 20% pero menos del 50%) Los husos del sueño pueden persistir. En esta etapa tampoco hay actividad ocular.

4.- Es la fase de mayor profundidad en el sueño y el patrón electroencefalográfico nos muestra una actividad lenta y de alto voltaje que comprende al menos el 50% del registro.
 


Los sueños de Movimientos Oculares Rápidos MOR, conocidos también como "sueños paradójicos", "desincronizados" o “D” se caracterizan por un EEG (Electroencefalograma) de baja amplitud y de frecuencia mixta similar al de las Fases del NMOR, excepto que las muestras de este tipo de sueño (MOR) son similares a las que se observan cuando la persona en cuestión permanece despierta y con los ojos abiertos con la salvedad de una total atonía muscular que muestra el EMG (Electromiograma).